11/5/08

Fordward Festival, la crónica.



(El programa, la entrada y la mascota)

El viernes 9 de mayo nacía otro de los tropecientos festivales del año, el Forward Festival.

La bajada progresiva a última hora en los precios de entrada nos hacía pensar que no estaban cumpliendo con las expectativas, y parece que así fue. Cuando llegamos al Arena, nos sorprendió no encontrarnos colas de entrada ni grandes aglomeraciones en la puerta.


Entramos cuando Isis pinchaba, y sonaba a hueco. Teníamos el tiempo justo para una vuelta de reconocimiento y asombrarnos con los precios (refrescos y cerveza a 2 euros y guardarropa gratis). Bajamos al escenario único, unas 500 personas y empiezan

Ladytron sonaron a ratos, regular, a ratos bien. Sobrios y estáticos en el escenario, cerraron con Destroy everything you touch, claaaaro.

Buenavista dj dio un rato de diversión, mientras cada vez el recinto se llenaba más.

Empiezan Soulwax vestidos de blanco nuclear y pajarita. Cada vez me gustan más. Ritmos y bajos abrumadores con voces, guitarras y batería analógica que conforman su peculiar estilo.

Nos tomamos a Diplo como un descanso para charlar y beber y empiezan uno de nuestros favoritos:



(Más vídeos, en nuestro propio canal de TV)


Fangoria se lleva una lámpara de techo -como la de la imagen- y otra de pie, un trono barroco y un escenario completamente distinto al de su Extraña gira. Luego nos enteramos en el CD que venden en la zona de merchandising de que se han cansado del blanco y querían algo como esto.

De modo que el concierto se estructura en tres partes: Las Nancys Rubias, la sesión versallesca y la teatral.

Como novedad, hacen versiones del Flash de La Prohibida, Supertravesti de las NR y una autoversión de La mosca muerta que nos dejó idem.

Más tranquilo de lo habitual sigue Alexander Kowalski -ahora ya con más público- y después

Underworld. Hacía eras que no los veía, fue un concierto corto, pero suficiente para arrancar con temas de su último álbum y tocar los temazos de siempre. Una escenografía mu chula, pero que desentonaba totalmente con Karl Hyde. ¿O era él quien lo hacía con el escenario? En fin...

Tiga empieza tranquilito, peta el sonido y acaba bruto. Casi todo normal si exceptuamos lo de petar el equipo, que lo toman los 2manydjs y lo rematan. Con gracia, eso sí.

Y ¡hala! a casita que ya está bien.

Conclusión. Muy bien el cartel y los precios, mu mal las colas en la barra a partir de la 1 a.m.

Si eso, repetiremos.

___________________________